Buscando el Milagro

Kizen se encontraba entrenando en la zona residencial, aunque no le gustaba mucho ese lugar y tampoco entrenarse (ya que siempre hacia lo mismo) estaba dispuesto a hacer lo que sea para descubrir su pasado, aunque tuviera que matar a alguien (o eso era lo que pensaba el...). Kizen solo esperaba a que un dia, quando ya alla descubierto su pasado, pueda vivir una vida normal, sobre todo queria amigos.

Kizen se giro extrañado, ya que nunca antes le habian hablado, tampoco conocia esa voz- ¿Te conozco?. Lo dijo mirando al suelo para no parecer nervioso ni tampoco asustado. Luego se dio cuenta de lo que dijo, que era un mago- Tu...Tu podrias ayudarme? Lo dijo asustado por lo que le podia contestar.

Que quieres decir ? No tengo nada de dinero. Kizen se pensaba que el mago hablaba de dinero. Luego se dio cuenta de que parecian ojos -Oye podrias quitar ese sombrero? No es que me moleste... Lo dijo retrocediendo unos pasos, solo por si acaso.

La simplicidad del chico era abrumante. Pero el joven mago también había sido simple, no mucho tiempo atrás, y comprendió que, en realidad, tampoco era de censurar.

- Eres directo, ¿eh? Nada, olvídate de eso... Dime, ¿para qué necesitas ayuda? ¿En qué puedo ayudarte? En cuanto al sombrero, no te preocupes, si quieres, lo quito de aquí, y lo pongo en otro sitio...

Y haciendo un truco de prestidigitación, que sabe todo mago que se precie, agarró el sombrero, lo sacudió, se convirtió un pañuelo, y alzando el brazo el pañuelo desapareció por la manga de Saytas, rápidamente, en un abrir y cerrar de ojos, y dijo, distraído:

- Ya sabía yo que eso de los botones ovalados era algo inquietante, tendré que decirle al modisto que me lo cambie...

Si... Dijo Kizen admirado por el truco, -Oh!, si, tu eres un mago verdad? Bueno... Si lo eres pues quiero que me ayudes a ir a otro mundo, por favor.

Kizen explico toda su historia al mago esperando que entienda -Bueno que me dices?

- ¿Enviarte a otro mundo? Es algo demasiado sencillo... ¿Sólo quieres eso? ¿Y qué te hace pensar que en otros mundos no encontrarás lo que no has encontrado en tí mismo?

Saytas suspiró. Llevarlo a otro mundo apenas le costaría un movimiento con el bastón, y ¡zas! desterrado, exiliado a otro plano, o simplemente transportado, eran maneras de verlo. Aunque le costaría energía mágica, claro. Pero estaría de vuelta muy pronto, y ya no le quedarían excusas para "enfrentarse" a Merlín.

Antes de que Kizen desapareciera se escucho un -Gracias! Y Kizen desapareció muy agradecido ya que ahora tenia posibilidades de encontrar su pasado y lo mas importante su destino.

Saytas se quedó algo confuso. No recordaba haber dado la orden a su avatar de transportar al chico aún.

"Cosas de volver al mundo material", se dijo. Hora de volver a ver a Merlín, definitivamente