Rumbo a un nuevo destino

Spoiler:

Habían pasado un par de horas desde que Donx despertó. Había estado caminando alrededor de la isla en busca de Tsubasa o los sincorazón, pero ni rastro de estos. Pensó que en el peor de los casos había caído en uno de esos portales oscuros con los que los sincorazones viajan, ya que no quedaba nada de su paso por la isla, nada excepto el gran estropicio con el que se encontró el peliazul al llegar a la ensenada. Se encontró con un escenario claramente deteriorado por una batalla, pero lo más importante que llamó toda su atención, la nave gumi casi destrozada!

¿¡Qué demonios habéis hecho con la nave!? - exclamó ignorando que allí ya no quedaba nadie. Caminaba a duras penas debido a las heridas de su pelea anterior hacia el escenario del crimen, cogió su búmeran de la espalda agarrándolo con una mano y mirando a los lados observando cada detalle a cada paso que daba esperando que algo le atacase, pero todo estaba tan tranquilo como aparentaba. Donx se enfadaba cada vez que miraba a la nave, no tenía intención de quedarse en aquella pequeña isla para el resto de su vida y rezaba para que funcionase, mejor dicho rezaba por el bien de la nave porque como no funcionase la iba a dar motivos para no hacerlo descargando su ira.

Parecía haber colisionado contra el suelo por algún motivo y las armas de las que disponía echaban chispas y seguramente no se podrían volver a usar, pero era un milagro que solo fuese eso y no hubiera volado en pedazos. -(Que habrá pasado)- pensaba una y otra vez contemplando la nave desde todos los ángulos inspeccionándola por completo. Aunque había estado mejor, estas naves estaban hechas para aguantar todo tipo de cosas y seguramente funcionaba perfectamente, o al menos es lo que Donx quería pensar mientras se dirigía al puente de la nave entrando en esta. Los mandos parecían estar bien, pero ahora no sabía que hacer.

Una vez más el joven mago se encontraba solo, estaba claro que Tsubasa no estaba en la isla, y de una forma u otra tenía que salir de ella para continuar su viaje pensando que le encontraría en algún otro mundo. Se acercó pensativo a los controles de la nave, no sabía como funcionaba ya que de aquello se ocupaba Tsubasa, pero al fin y al cabo en algún momento tenía que aprender a manejar esta él solo y además ya había visto a su compañero hacerlo. Buscó en un compartimento el manual que les guió una vez y le echó un ojo, parecía complejo para aprenderlo al momento y Donx pensó que sería mejor seguir las instrucciones paso a paso con él, pero lo primero era lo primero, la nave estaba muy inclinada para despegar y si lo intentaba podía salir mal parado.

Salió de la nave lo más rápido que pudo observándola por completo. La parte derecha estaba hundida en la arena por la batalla y con pura fuerza no iba a conseguir sacarla, pero rápidamente le vino una idea a la cabeza que no costaría demasiado esfuerzo. Creó unas cuantas burbujas de agua que colocaría bajo el ala derecho para elevar esta y así equilibrar la nave. Donx no estaba totalmente repuesto pero podría hacer eso de sobra, y así fue, la nave se estabilizó y estaba lista para ser usada, bueno, dentro de lo que cabe.

Una sonrisa se dibujó en la cara del joven. todo estaba listo una vez más. Volvió al interior de la nave e inició el despegue siguiendo paso a paso las instrucciones. Tardó algo más de lo que esperaba probando botones y palancas, pero al final no parecía tan difícil, seguro que podía conducir sin estrellarse con nada. La nave se elevó como la primera vez alejándose de las islas con los propulsores traseros activados. Aquella maravillosa vista de todos los mundos se podía contemplar desde la nave, hacía sentir a Donx que aun le quedaba mucho por ver y descubrir. Agarró los mandos, y se dirigió rumbo a un nuevo destino...