Planes de futuro...

Vanessa esperaba al pie de la escalera, mirando hacia arriba, a Kyotsu.

Kyotsu siguió sin ningún tipo de impediemnto a aquella hermosa mujer.
Se quitó de el arco de la entrada y introdujo sus manos en sus
bolsillos, haciendo así ése característico sonido del cuero rozando...
Avanzó hasta alcanzarla, y así comenzó a hablar.

-¿Qué intenciones tienes? Sin duda, venías buscando información importante relevante a un objetivo específico- **igual que yo**(pensó)

No cesó de caminar a su lado por aquel pomposo jardín bañado por la característica luz que bañana los lugares alegres y ausentes de oscuridad... el sol pegaba fuerte en su piel y parecía hacerlo sentir algo más vivo, aunque... su pasado fuese bastante oscuro.(ver en ficha de personaje xD).

en ningún momento le dirigió una mirada, solo con paso lento caminaba a su lado y miraba al frente contemplando las maravillosas estatuas de alabastro y los setos podados con formas de animales... Era bastante bonito, y podría llegar al punto de romántico.

Lo miraba de reojo, adaptándose a su paso.

- Sí. Buscaba información sobre algunos objetos mágicos... Tengo… planes.

Parece bastante parca a la hora de dar explicaciones. Total, un apretón de manos no era ni un seguro de vida, ni un pacto, ni aseguraba fidelidad o silencio. Más valía andarse con ojo a la hora de hablar según de qué cosas.

- Tú parecías muy interesado en aquel libro, aunque no llegué a ver el título.

Se mira las manos unos segundos, y luego las junta a su espalda. Aunque debiera estar maravillada por las espectaculares estatuas y setos, puede con ella la abrumación que le causa el pasear junto a Kyotsu, por lo que apenas repara en ellas. Nunca había confiado demasiado en los hombres ni en sus ocultas intenciones, y no es que se fiase ahora de éste, pero quizá por el hecho de que no la miraba constantemente o por su carácter algo distante, no le importaba estar junto a él.

*Kyotsu soltó un suspiro y se detuvo en seco mirando hacia Vanessa pero sin girar el torso, solo el cuello. Entonces el dijo:

-Tú tienes planes, yo una nave gumi; desconozco como has venido hasta aquí pero para salir la opción más sensata sería conmigo... Y si quieres compartir mi nave gumi... tendrás que ganarte mi confianza, por lo que... *Volvió a preguntar sabiendo que se había quedado corta en la explicación* ¿Qué intenciones tienes?

*Sus ojos mantenían su mirada de una forma penetrante con aquellos iris de color tan negros que podían compararse a un abismo, parecía como si le estuviese escudriñando la cabeza; aunque simplemente era su inexpresiva cara con sus matices de luchador la que le hacían la tez algo... Intimidatoria.

Kyotsu había negociado con el mismísimo hades y ello era una miestra que de tonto no tenía un pelo, ya que consiguió lo que quería; un torneo a su honor y dinero por las misiones para poder sobrevivir. Luego éste arqueó una ceja asimilando lo que le había dicho del libro.

-Su título era "conjuros a partir de cosas", o "Cosas a partir de conjuros..." algo así- Demostró no tener mucha memoria, pero quizá estaba ocultando parte de su información para que la otra persona no llegara a comprender con más facilidad su objetivo.

Se para en seco cuando él la mira. Su actitud tan directa la hace sentirse insignificante, pero analizando su razonamiento comprueba que él tiene razón. Salir en su nave es la mejor opción para ambos, siempre y cuando
él creyese que ella le aportaba algo.
“Conjuros… ¿Acaso es mago?” Por su apariencia, desde luego no lo parecía, pero teniendo en cuenta el caos reinante en los diversos mundos, quién era ella para poner en tela de juicio el aspecto de nadie. Mejor sería contestarle.

- Busco objetos mágicos, porque quiero hacerme con el control de un mundo. – Le mira con cierta insolencia al ontestar, alzando el mentón. - ¿Conforme?

-Así que... Es algo relacionado con alguna especie de venganza- A Kyotsu le entretenía ésa situación, ya que al alzar la cabeza la humana vislumbró en sus ojos aquel sentimeinto que tan bien conocía.

-Sabes qué. Nos parecemos más de lo que tú te crees.- añadió misteriosamente y se tomó la confianza de apartar su mano diestra de su bolsillo de cuero y extenderlo hasta el hombro zurdo de ella, que se encontraba con la cabeza hiperextendida demostrando algo de soberbia y Ego.

Mi aspiración es *apartó la mano del hombro de ella y alzó el mentón lentamente mirando a las nubes, como si en ellas se reflejara un sueño* Encontrar a un rival digno. Veo bien que decidamos donde partir. Ahora puedo ayudarte en tu cometido, pero claro; no será gratis.*Se dio media vuelta* págame con lo que quieras...*y comenzó a caminar hacia el exterior del jardín, entrando nuevamente al castilo con la intención de bajar la escalera y ir al hangar gumi. su paso era lento para que ésta le respondiera, pero no se detenía, ya que es una característica de su personalidad.

¿Tan obvia era la venganza? Bueno, ya estaba dicho. Ya no hacía falta mantener era pose arrogante. Él había dicho que la ayudaría…
Cuando él empieza a alejarse ella sigue anclada en el suelo, sin poder creerse que la haya tocado, y más aún que no haya reaccionado ella misma de forma brusca o huidiza. Sonríe y se pone en marcha tras él, pudiendo
admirar así su cuerpo sin sentirse observada.

- Te pagaré, sí… - “Pero todavía no sé con qué.” Al final acaba andando a su lado, dejándose guiar por el laberíntico castillo, desconocido para ella. Al cabo de unos minutos en silencio, le mira de reojo y de nuevo le habla:

- ¿Tan fuerte eres como para no encontrar enemigos que estén a tu altura?

-Uno siempre piensa que una espada es mejor que los puños *Dice sin cesar de caminar espaciando el tiempo entre frase y frase para volver a articular nuevamente.- yo acabo con espadachines con mi puño...-* y los apretó mientras caminaba...

Se internó en el castillo y bajó las escaleras hasta el hangar gumi donde había depositado su nave...

][sigo en el hangar gumi][