paseo por el distrito 3 (libre)

La plateada luna bañaba todo el distrito 3 con su hermosa luz, de repente uno de los portones para ser mas esactos el que conducia al distrito 2 se habria de par en par dejando ver una silueta de una joven adoleccente de aproximadamente 19 años que caminaba a paso firme sobre el suelo del distrito tres, siguio caminando hasta llegar al centro del distrito y recolocandose el pelo mientras mirada a su alrededor tranquilamente, la joven vestida con uniforme de lo que parecia el reglamentario de la escuela de ciudad de paso se sento tranquilamente en el centro de esa especie de plaza orientada a la puerta del distrito 1 ya no muy transitado devido a la hora que era, la joven poso una de sus manos en el suelo y con la otra tocaba un colgante que colgava de su cuello haciendolo girar tranquilamente como si se tratara de un juego.

Ya habia pasado medio dia desde el encuentro del joven Marik con aquel atipico trio de intrepidos humanos que apenas llegaban a la categoria de "amago" de aventureros. Cierto era que, pese a todo, habian logrado captar la atencion del chico de cabellos ambarinos, pero ahora él tenia otras cosas en que pensar.

Mientras depositaba sus posaderas sobre la cornisa de una de las fachadas del tercer distrito, Marik contemplaba el cielo nocturno al ritmo que profundizaba en su propia consciencia:

-Aun no. Me falta demasiado. Si solo tuviera a alguien conmigo. Si, con unos pocos me vastaria pero...- en ese instante, Marik pudo percivir la presencia de una muchacha de no mas de 19 años de edad que descansaba sobre un de los bancos de las cercanias. Aunque mas que prestarle atencion, no fue sino el hermoso colgante que poseia lo que consiguio atraer su mirada; la mirada de un ladron.

Sin haber terminado de despejar su mente, el astuto ladroncuelo de aspecto jovial descendio con sigilo de su posicion para situarse detras de aquella chica.

-Es raro ver a alguien purulando por aqui a estas horas de la noche. Dime, ¿a ti tambien te agrada la luna?- dijo Marik con una dulce sonrisa abarcando su rostro mientras se mostraba ante la dama de cabello obsidiano. Todavia depie y a sus espaldas, a la vez que alzaba la vista para contemplar una vez mas el brillante lucero de morfeo.

La joven de pelos alargados ascendió la vista hacia mirando a lo que parecía ser un joven con el pelo rubio mirando hacia el cielo, la chica se levanto mirando cesando la mirada hacia el joven mientras seguía tocando su collar.

-Más bien quería encontrarme con una de las criaturas que le agrada una noche así, pero se ve que no es mi día de suerte-

Dijo mientras se levantaba d su asiento para luego darse la vuelta hacia el joven y mirarlo fijamente mientras daba unos pequeños golpecitos al collar para que se moviese de un lado a otro para ver si captaba la curiosidad de aquel joven, era evidente que a esas horas un joven de esa edad no podría estar solo por la calle a menos que tuviese el mismo peligro que las criaturas que rondaban por allí.

-Un joven no debería de vagar solo por esta ciudad a estas horas de la noche, ¿no as escuchado los rumores que vagan por toda la ciudad? podría de repente cazarte una bestia horripilante y llevarte a la oscuridad para devorarte-

Dijo mientras comenzó a reírse sin poderlo evitar, era algo gracioso que una chica que tenia una edad similar a la suya comenzara a decirle cosas tan macabras para inducirle miedo, aunque realmente no le hacia ninguna gracia la realidad de esas criaturas que una vez le contó Leviatán.

El joven de cabellos ambarinos no pudo evitar sentirse disgustado al ver como aquella chica ignoraba su pregunta para lanzarle una de las suyas. Obviamente Marik nunca llego a amosar ese sentimiento de descontento en su semblante, ya que por dentro le reconcomia una sensacion diferente.

Claro estaba que Marik no era de esos que desistian a la primera de cambio, aunque ciertamente estuvo tentado. No obstante, en vez de marcharse, se limito a sentarse discretamente a su lado para responder a sus palabras:

-juju, ¿devorarme dices?...-dijo en un tono carismatico, esperando romper la tension del amiente que reinaba entre ellos dos; -...Me gusta tu forma de pensar. Ademas, por alguna razon me siento seguro a tu lado- continuo hablando, siempre sin perder esa inocente sonrisa que le acompañaba.

Cuando la luz de una farola hubo alcanzado la piel del joven, este extendio su diestra por encima de su cabeza, intentando apresar la luna con la tersa piel de sus dedos:

-Ultimamente me paseo por los tejados de aqui todas las noches. Jeje, supongo que soy como un gato callegero. Espero no molestarte con mi presencia. Me llaman R.I.P. ¿Serias tan amable de decirme tu nombre?- cuando Marik concluyo su alegato, se dispuso a dirigir sus profundos iris dorados hacia su acompañante, para entablar finalmente contacto visual con el rostro de la joven.

-Nimu, me llamo Nimu, se necesita mucha agilidad y control para saltar de tejado en tejado-

Dijo mientras miro al joven con una sonrisa en la cara, sonrisa que como por el aire fue borrada rápidamente, la joven miro hacia una de las partes por donde se llegaba a la puerta del distrito 2, no tardo en avistar una sombra que se alejaba de la inmensa oscuridad acercándose a su posición, pero esa sombra no iba sola, estaban totalmente rodeados de lo que parecían ser sincorazones.

-Por fin llegaron tardaban demasiado, R.I.P. no te separes de mi-

Dijo poniéndose delante del joven mientras la sombras comenzaban a moverse de un lado para otro, Nimu no lo dudo ni un momento, cerro los ojos y entonces su collar comenzó a brillar intensamente.

-!Leviatán yo te invoco¡-

Nada mas decir eso, el lugar comenzó a llenarse de agua, pero levemente, era tan poca el agua que no llegaba ni a mojar la mitad de los zapatos de Nimu, en ese preciso instante el agua comenzó a coger una forma como si el agua en si cogiese la forma de una especie de serpiente gigante, poco a poco se creo esa bestia alrededor de la joven hasta llegar tener su aspecto original.

-Leviatán, devuélveles lo que hicieron a nuestra ciudad, devuelveles lo que hicieron a nuestro mundo-

Dijo señalando ágilmente hacia el frente, la gran serpiente lanzo mini chorros de agua de su boca de tal forma que agujereaba los cuerpos de los sincorazones como si fuesen balas.

-Malditos bichos, !!Leviatán devuélvelos del agujero inmundo del que an salido¡¡¡-

Dijo mientras les señalaba mientras el brillo de el collar creaba una luz mucho mas fuerte intensificando el poder de la criatura que lanzo un devastador grito que hizo temblar todos los cimientos del lugar, en el preciso instante en el que ceso el sonido el agua del suelo fue atraída justo delante de la serpiente creando una ola de inmensas proporciones que callo encima de los enemigos aplastándolos y golpeándolos contra el suelo y las paredes (cabe recalcar que Nimu y Marick se encontraban justo detrás de Leviatán con lo cual la ola no les afecto)

La joven no tardo en caer al suelo sentada con una mano tocándose la frente mientras respiraba con un poco de dificultad, comenzaron a aparecer mas y mas bajaban de los tejados, puertas, ventanas salían de la oscuridad poco a poco no paraban de salir como aquel día, Nimu se levanto algo exhausta y se puso delante del joven.

-Tranquilo, todo saldrá bien te lo prometo, !Leviatán, destrúyelos¡-

Dijo mientras la gran serpiente disparaba los chorros bestiales de agua y golpeaba con la cola a los sincorazones que llegaban a su posición.

La situacion no parecia ir a mejor. Mas bien empeoraba por momentos; uno tras otro esas repugnantes sombras no dejaban de asomar su horripilante cara. Ademas la joven Nimu no tardo en desfallecer casi por completo debido a la energia que requeria el mantenimiento de Leviatan. Ella sabia que, de seguir asi, pronto perderia el conocimiento y eso era algo que Marik no podia permitir. No despues de lo sucedido. No despues de haber despertado su interes.

-Aguanta- susurro Marik al oido de la joven justo despues de haberse desplazado para sostenerla en sus brazos y asi evitar que se desplomase sobre el humedo asfalto. Mientras, la lluvia, resultante de la colision de la ola que genero Leviatan segundos atras, comenzaba a precipitarse sobre el lugar, empapando por completo el suelo con una fina capa de agua cristalina que reflejaba el manto de la noche.

Los sincorazones ya se hallaban a su alrededor y mismo habian empezado a avalanzarse sobre Leviatan con la agresividad y ferocidad propias de un depredador. Marik supo entonces que no era tiempo de seguir actuando. Debia entrar en accion.

Tras dejar el cuerpo de Nimu sobre el banco en el que anteriormente habian estado hablando, dirijio una fria mirada hacia el Leviatan, tratabdo de transmitir su deseo de proteger a su compañera. Todavia con ese brutal cambio de expresion en su rostro, Marik se acerco con paso firme hasta él y estrajo una pequeña antena muy peculiar desde su bolsillo, junto con un avanzado telefono movil que paso a sostener en su mano derecha.

-¡Eh, serpiente! Tambien quieres protegerla, ¿no? Entonces ofreceme tu fuerza-

Acto seguido Marik inserto la miniantena en la frente de Leviatan. Todo formaba parte de su curiosa habilidad para controlar a otros seres vivos usando su telefono, I-pad. Asi, podria hacer que la enorme serpiente marina siguiese de su lado, dando el 100%, incluso si Nimu perdia el conocimiento pot completo.

Tras formalizar su pacto temporal, Marik comenzo a pulsar los botones de su I-pad, con lo que el cuerpo de Leviatan se desplazo a una velocidad despanpanate para ir acavando progresivamente con todos y cada uno de los sincorazones.

Al finalizar tal epica batalla, el sol se asomo desde el este guiado por un mar de nubes. Despues de una interminable noche, los sincorazones desistieron temporalmente su ofensiva y Marik no hizo otra cosa mas que recuperar su antena de la frente de Leviatan, al ritmo que caia al sualo de la calle, exausto por el esfuerzo.

Spoiler:

Leviatán comenzó a desaparecer evaporándose en el aire mientras el collar cambiaba ligeramente dejando de brillar para volver a su estado original, la chica respirando bastante fuerte comento al joven.

-Anda que no poder con una horda de sincorazones, aun tengo que mejorar mis habilidades-

Dijo levantándose del banco tambaleándose levemente hasta el joven y le ofreció su mano.

-Levanta, o una sombra te podría devorar los pies-

Dijo mientras le sonreía intentando tranquilizar al joven, las sombras también solían salir por el día pero era mejor evitar ese comentario.

Marik habia quedado completamente agotado. Era normal, ya que nunca habia usado su habilidad durante tanas horas seguidas y quien sabe si, de no haber salido el sol, hubiera podido resistir él solo contra los sincorazones.

Pero eso ya era agua pasada. Ahora la prioridad residia en comprobar que tanto Marik como Nimu estaban bien. La joven de obsidianos cabellos se levanto por fin del banco donde Marik la habia dejado, para acercarse hasta él y extenderle la mano con el proposito de ayudarle a incorporarse.

Marik agradecio el gesto esbozando una calida sonrisa. Sin embargo, en su interior algo le preocupaba enormemente:

-¡Lo habra visto! parecia que descansaba, pero ¿y si ha podido ver mi habilidad? No, no es posible. Espero que no se haya dado cuenta. De lo contrario...- penso a la vez que le extendia su zurda para erguirse lentamente sobre sus rodillas.

Una vez de pie, Marik actuo como si antes hubiese perdido el conocimiento debido a la impresion del combate, con el fin de dar a entender que no sabia nada de lo sucedido; ni tampoco por qué estaban a salvo:

-¡Eishh! como me duele la cabeza. Gracias Nimu, te devo una- dijo dirigiendose a su nueva amiga.

Entre tanto, los primeros transeuntes comenzaban a poblar las calles del distrito...

Miro algo estrañada al joven, no sabia si se estava haciendo el loco, supongo que tendria miedo que los demas lo escucharan o algo, Nimu se giro para darle la espalda al chico.

-Porque no damos un pequeño paseo mientras conversamos e R.I.P.-

Comenzo a caminar tranquilamente esperando que la siguiese.

-¿Es la primera vez que ves a esas criaturas o criaturas similares? y asme un favor, no te agas el tonto, eso me saca de mis casillas-

Dijo mientras seguia caminando por la multitud mientras no dejaba de mirar de vez en cuando atras para ver si el joven no habia huido o algo similar.

- No se cual es el lugar de donde proceden, cual fue el mundo en el que se originaron, mi mision es ir alli y derrotarlos a todos, pero para ellos nesesito aliados y evidentemente tu sabes defenderte ¿no es asi R.I.P.?-

Dijo mientras se girava mirando fijamente al joven mientras la gente seguia caminando sin saber que era lo que ocurria realmente.

Perdona. No era mi intencion sacarte de tus casillas. Y no me hagas mucho caso; soy un tipo complicado- Respondio Marik; esta vez con una expresion mas apagada en su rostro.

-En cuanto a esas criaturas que nos acechaban antes, ya me habia cruzado con ellas un par de veces. Por lo que he podido leer, se que nacen de los corazones podridos de la gente que sucumbe a la oscuridad. No tienen hogar al que regresar y no proceden de ninguna parte-. Tras una breve pausa durante la cual acelero su marcha para colocarse a la altura de Nimu, Marik introdujo ambas manos en los bolsillos de su jersey y cerro los ojos.

-Si de verdad quieres que te ayude necesito algo a cambio, mi querida *piedad- Marik volvio a detener sus palabras para cojer aire y abrir los ojos, dirigiendose directamente hacia Nimu con una mirada decidida y alientadora, -necesito que confies en mi. Intercambio equivalente: para recivir mi apoyo, dame algo igual de valioso-

Al terminar de hablar, Marik se detuvo en medio de la calle. No tenia intencion de escapar; solo queria comprovar hasta qué punto Nimu estaba dispuesto a colaborar. Con esta intencion, se limito a esperar la respuesta de la joven de mirada decidida...

OFF: *piedad (por si acaso nadie sabe a qué me refiero): asi es como se llaman a todas esas esculturas en las cuales se muestra a la virgen Maria sosteniendo el cuerpo muerto de Jesus tras su crucificcion. Una de las mas conocidas es la Piedad de Miguel Angel, la cual se encuentra junto a la Basilica de San Pedro del Vaticano; concretamente en la Capilla Sixtina.

La joven se quedo sorprendida, era vastante estraño que una persona que se ubiese visto unas cuantas veces con esas criaturas supiese tanto de ellas, la joven se acerco al chico que se habia parado mirandola fijamente y extendio su mano.

-Mi confianza esta en ti, pero solo pido que no la defraudes-

Dijo mientras esperaba el comentario del joven, era su decicion acectar la confianza de ella o olvidarla y darse la vuelta.

Nimu parecia haber aceptado las condiciones de Marik. Ahora solo faltaba que él concluyese el pacto, que es exactamente lo que hizo:

-Jamas traicionare tu confianza. Amarro estas palabras a mi propia vida-. A continuacion, Marik extendio su diestra y hizo aparecer de la nada un movil tactil de ultima generacion, con la cubierta metlica bañada en negro mate. Asi él esperaba que su nueva compañera se dignase a colocar su mano sobre la suya, tocando con ello la tapa del pequeño artefacto.

En ese instante una imprevista rafaga de viento se aproximo desde el sur del distrito, agitando asi los cabellos ambarinos del muchacho.

La joven coloco su mano sobre la del joven mientras sentia el frio tacto de una especie de objeto que tenia en la mano el joven en ese instante.

-¿Que es?-

Dijo mientras miraba al chico con una estraña mirada, no sabia esactamente que era lo que tocaba y mucho menos que podia hacer.

-Bueno si insistes-

Dijo acercandose y sentandose en el asiento que estaba justo delante de su amigo, y colocandose comodamente en el.

-¿Y para que sacastes tu i-pad? no es normal estrechar la mano de alguien con un I-pad en la mano-

Dijo mientras seguia mirando fijamente al joven.

Marik se miro la mano extrañado, pero a la vez comprensivo:

-Sí, supongo que tienes razon. Esta cosa, mi I-pad, viene a ser el catalizador de todas mis habilidades- dijo mientras se apresuraba a materializar su movil entre sus dedos.

-Se que esta mal que yo lo diga, pero nunca he conocido a nadie con unas tecnicas mas versatiles que las mias. El unico inconveniente es que dependo por completo de él-. Al finalizar su explicacion, Marik dejo caer el I-pad desde la palma de su mano y, antes de que este hiciera contacto con el suelo, se esfumo sin dejar rastro.

-Como acabas de ver, mi I-pad desaparece si se separa de mi cuerpo-.

Unos momentos despues, un pequeño ser flotante con un llamativo traje de camarero se arrimo hasta la mesa en la que ambos se encontraban. Marik alzo su diestra para indicar que tomaria un baso de agua y posteriormente se dirigio hacia su amiga con la mirada, cediendole el turno para pedir:

-Ahora es tu turno. Sin secretos, me gustaria que me contases todo a cerca de tus tecnicas; si eres tan amable-

Spoiler:

La joven agarro el collar extendiendolo hacia el joven dejandolo algo distanciado de la joven mientras quedava suspendido en el aire gracias a la cuerda de oro que lo sostenia.

-Este collar lo utilizo como canalizador de magia, esto me permite utilizar magia de una forma mas facil ya que la mayor parte de la magia sale del colgante, y a parte me permite poder hablar con las invocaciones y entenderlas, claro que alguien que no lo supiera utilizar solo seria un simple colgante-

Dijo mientras lo dejaba caer haciendo que volviese a quedarse sostenido en su cuello, la joven pidio un vaso de agua al igual que joven, los que trajeron en un instante, la joven comenzo a beber levemente del baso para luego dejarlo donde mismo lo habia dejado segundos atras el camarero.

Offtopic:

Spoiler:

Spoiler:

ON: Marik aproximo el baso de agua hasta sus labios y comenzo a beber mientras recapacitaba sobre sus planes y sobre como podia incluir a su nueva amiga en ellos.

Medio minuto despues, el muchacho de cabellos ambarinos deposito el baso sobre la mesa, usando el meñique como apoyo pata que no hiciese ruido al apoyarlo, a la vez que dirigia la vista hacia el centro del distrito. En contraste con la noche anterior, aquel caluroso dia revosaba tranquilidad: ciudadanos, mercaderes, animales callegeros; todos recorrian las calle s de un lado a otro agenos a los peligros que acechaban en la villa al caer el sol. Pero esos extraños mountros de oscuridad no purulaban exclusivamente por ese mundo. No, los sincorazones eran un peligro palpable para todos los mundos del reino de la luz.

Marik sabia muy bien que a su nueva amiga no le agradaban nada esas escalofriantes criaturas, de modo que trato de discurrir unsos argumentos que la convenciesen para apoyar su causa:

-Nimu, se que tendras tus razones para seguir adelante; pero si intentas ir a por los sincorazones tú sola, solo conseguiras tirar tu vida por la vorda. Veras yo, lo se por experiencia...- y asi fue como Marik comenzo a revelarle su pasado a la joven invocadora.

Cuando por fin hubo acavado de narrar lo que nunca se habia atrevido a decirle a nadie, arrojo su profunda mirada a los ojos de Nimu, esperando que ella compartiese su historia con él. Esperando que compartiese su dolor.

Spoiler:

La joven escucho la historia de su amigo sin pestañear, al parecer su vida no habia sido nada facil como la de Nimu, la joven se valanzeo levemente hacia atras haciendo que la silla se quedara a dos patas por detras quedando levemente en el aire mientras la joven miraba hacia el cielo azul.

-Mi vida, vivia en un mundo alejado de este, vastante alejado de este, alli conoci a leviatan, este colgante es un regalo que el me ofrecio pero el mundo en donde vivia fue deborado por la oscuridad y mis padres y los abitantes que no fueron consumidos uyeron en otra nave gumi, deveria de estarlos buscando pero tengo mejores cosas que hacer-

Dijo la joven mientras cojia nuevamente el baso y bebia todo lo que estava en el interior del recipiente de cristal.

-Hmm... ya veo- dijo Marik al tiempo que cruzaba los brazos tras oir la historia de su nueva amiga. Al cavo de un minuto durante el cual surgio un silencio incómodo, el joven de cabellos ambarinos retomo la conversacion:

-Bien, entonces no tiene sentido que le des mas vueltas a este asunto. Permiteme explicarte; yevo un tiempo intentando reunir un grupo de personas que compartan mi percepcion del mundo. Personas bien definidas con habilidades unicas y, sabes, en toda mi vida no he conocido a nadie con unas tecnicas y una actitud como las tuyas- Marik se detuvo nuevamente para recuperar el aliento, -no pienso obligarte a seguirme si no quieres, pero ahora que conozco tu historia no puedo pasar por alto tu sufrimiento. Este mundo, y todos los demas, estan podridos por la maldad que arraiga en los corazones que las personas que lo pueblan: timadores, estafadores, asesinos, gamsters... y aun asi los humanos no son capaces de darse cuenta de ello. No son capaces de reconocer la maldad que se halla delante de sus narices, o simplemente no se atreven a abrir los ojos. Mientras asi sea, los sincorazones seguiran apareciendo para destruirlo todo. Eso es precisamente lo que pretendo evitar-

En ese momento Marik se puso en pie y levanto la vista al cielo, -dejare al descubierto la maldad que hay en todos y cada uno de los mundos, para que asi todos puedan verla y se den cuenta de sus herrores. Si destruimos la maldad, tambien destruiremos a los sincorazones-.

Al terminar su emotivo discurso el joven picaro de cabellos ambarinos extendio su mano derecha hacia Nimu, a la espera de que ella la recogiese y le respondiese a la siguiente pregunta que formulo...

-¡Eh Nimu!, ¿estarias dispuesta a venir conmigo?-.

La joven se quedo pensando durante unos instantes, la forma que habia contado el joven no era la adecuada a los ojos de la joven o no sabia si lo habia entendido mal de todos modos le convenia ir con el por ahora, luchar sola contra los sincorazones no era buena idea y mas cuando sabia que devia potencia su habilidad, la joven extendio su mano posandola en la del joven.

-Trato echo-

Dijo en ese instante.